Es usted no-residente y dispone de una cuenta bancaria en España para poder gestionar los gastos generados por su bien inmueble en España. Los bancos españoles suelen solicitar a sus clientes no-residentes, cada dos años, la actualización de su documento de identidad o pasaporte, así como los justificantes de ingresos. El sector financiero también participa en la lucha contra el blanqueo de capital. En caso de no aportar las citadas actualizaciones, su cuenta quedaría bloqueada. Para evitar estos incidentes, también puede domiciliar todos sus recibos en su cuenta bancaria francesa directamente.